martes, 5 de junio de 2012

A diós rogando con la maza dando y de putas mientras tanto

Cada día que pasa van sobrando y sobrando...


Hoy, me detendre (o igual me detiene él) a hablar del todopoderosísimo, cual x-men, presidente del poder judicial, un tal Dívar.


Resulta que se ve que al señor Dívar siempre se le olvida el monedero cuando va por ahí, y claro, que si comidita en la playa, que si güisquitos en la barra, que si.......encima de la barra. Y quién lo pagará todo? Pués quien va a ser, usted!! Tonto del culo!


Sí, sí, que se creía que un sueldo de 7000€ al més daba para tanto...no señor, como estan hoy las cosas, a Dívar el presi del poder, no le llega para pagarse las paellitas con los amiguetes y lo carga todo al presupuesto del poder, que dicho sea de paso, lo deciden los propios miembros del poder, lo que se viene llamando, yo me lo guiso yo me lo como!


Además, a todo esto hay que sumarle el coche oficial (que no suele usar porque prefiere el avión para ir de Madrid a Marbella) los escoltas (siete nada más y nada menos, pués vaya mierda de poder si necesitas que te protejan), etc.


Algunos miembros del poder sí explican en que gastan el dinero de todos, pero el presi no.
¿Qué esconde? 
¿A quién tiene miedo?
Yo os lo diré....hombre muy religioso (católico por supuesto) le tiene miedo a Él, a el Todopoderoso, omnisciente y creador de tipos tan imbéciles como él. 



Y encima se jacta de su poder y no dimite. ¿Por qué? Porque en este país no dimite nadie!
Viéndole hablar me parece que sólo le faltaba acabar repartiendo obleas P Tinto!
El presi dice que distingue los gastos oficiales de los personales....claro:


Gastos oficiales-----fin de semana de Jueves a Martes (con la cosiguiente ausencia de su puesto de trabajo, atrevete tú si tienes agallas) en Puerto Banús para recibir una medalla de no se qué cojones de méritos.


Gastos personales-----Todo lo que se puede hacer en Puerto Banús durante séis días, dado que el acto de la medallita duró una tarde, para no aburrirse, leanse: Comilonas, putas, güisquis, putas, cenas, putas, misas, putas, etc y putas.


En fin, sobran políticos, también en la justicia (si así se podemos llamar al tinglado que nos han montado)

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